Ayer escuchaba a mi profesor de Nuevos Medios hablar sobre los nuevos paradigmas de la comunicación y, conforme los iba explicando, además de impresionarme cada vez más por lo perdida que he estado todo este tiempo en cuanto al mundo virtual, me iba entusiasmando muchísimo al aprender todo lo que puedo sacar de él, en especial como comunicadora.
En los últimos años, he escuchado decenas de expertos en comunicación hablar sobre el peligro que corren los periodistas con la Web; sin embargo, al ir escuchando las explicaciones de cada paradigma y sus aplicaciones, lograba ver dicha situación desde un punto de vista diferente. Los paradigmas explican cómo ha ido evolucionando el mundo de la información y todos los aspectos y necesidades que con esta evolución se han ido creando y/o modificando. Curiosamente, el décimo paradigma no se refiere a ninguna necesidad creada o modificada por los nuevos medios; por el contrario, enfatiza en la importancia de un aspecto que se le debe dar continuidad y es el de la existencia de profesionales del periodismo, incluso en esta nueva era digital.
Los medios tradicionales se enfrentan al eterno problema de la escasez de tiempo y espacio; aunque el mundo digital no conoce estos límites, sus usuarios sí. Es por esto que, contrario a lo que especula la sociedad en general, la raza periodística está lejos de desaparecer. Aún se necesitan personas capaces de filtrar la marea de información que aparece en la Web, analizarla, sintetizarla y luego transmitírselas para que puedan ellos accesar a información relevante desde cualquier lugar, en cualquier momento.
Con esta idea comienza una nueva era también para el periodismo, pues se abre un mundo de oportunidades como la conocer aún más a sus audiencias, poder escribirles y/o hablarles de manera más directa y personalizada, y, sobre todo, en tiempo real. Por supuesto para entrar a esta nueva era, habrá que enfrentarse a muchísimos retos, varios de los cuales son destacados en el blog de Santiago Tejedor, Profesor del Departamento de Periodismo y Ciencias de la Comunicación de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), titulado “Los 10 retos del ciberperiodismo”. Estos retos resaltan la tarea que tienen los comunicadores de adaptarse a las necesidades y lenguaje de las audiencias del mundo digital: ¿Cómo leen?, ¿Dónde leen? ¿Cuándo leen?, etc. A la misma vez, los medios de comunicación les urge encontrar la forma de de rentabilizar todos estos esfuerzos.
Una propuesta que busca dar solución a este tema tan complejo la ofrece el American Press Institute en el “Newsmedia Economic Action Plan” (PDF). En esencia, se trata de un plan que garantizaría la rentabilidad de la presencia de los medios en la Web por medio de la utilizacion de aparatos como el Kindle y la aplicación de suscripciones y/o micro-pagos, particularmente refiriéndose a los medios impresos. De llegar a establecerse, pienso que ofrecería una solución que se adapta a manera en que las personas reciben la información hoy en día. Definitivamente implica un esfuerzo que verá resultados tangibles a largo plazo, pues será un reto lidiar con la reticencia que normalmente presentan las personas al encontrarse con cambios tan radicales. Sin embargo, una vez este establecido el mundo de la información cambiará por completo. Seguiremos teniendo acceso a la marea de información que se multiplica a cada minuto, sin embargo, habrá una idea más clara entre lo que es “información” y lo que es “conocimiento”. Dará la oportunidad a las personas de accesar a la información que es relevante para ellos, y a los periodistas les brinda la oportunidad de especializarse aún más, establecer una relación más fuerte con sus audiencias, y aumentar su credibilidad.
En los últimos años, he escuchado decenas de expertos en comunicación hablar sobre el peligro que corren los periodistas con la Web; sin embargo, al ir escuchando las explicaciones de cada paradigma y sus aplicaciones, lograba ver dicha situación desde un punto de vista diferente. Los paradigmas explican cómo ha ido evolucionando el mundo de la información y todos los aspectos y necesidades que con esta evolución se han ido creando y/o modificando. Curiosamente, el décimo paradigma no se refiere a ninguna necesidad creada o modificada por los nuevos medios; por el contrario, enfatiza en la importancia de un aspecto que se le debe dar continuidad y es el de la existencia de profesionales del periodismo, incluso en esta nueva era digital.
Los medios tradicionales se enfrentan al eterno problema de la escasez de tiempo y espacio; aunque el mundo digital no conoce estos límites, sus usuarios sí. Es por esto que, contrario a lo que especula la sociedad en general, la raza periodística está lejos de desaparecer. Aún se necesitan personas capaces de filtrar la marea de información que aparece en la Web, analizarla, sintetizarla y luego transmitírselas para que puedan ellos accesar a información relevante desde cualquier lugar, en cualquier momento.
Con esta idea comienza una nueva era también para el periodismo, pues se abre un mundo de oportunidades como la conocer aún más a sus audiencias, poder escribirles y/o hablarles de manera más directa y personalizada, y, sobre todo, en tiempo real. Por supuesto para entrar a esta nueva era, habrá que enfrentarse a muchísimos retos, varios de los cuales son destacados en el blog de Santiago Tejedor, Profesor del Departamento de Periodismo y Ciencias de la Comunicación de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), titulado “Los 10 retos del ciberperiodismo”. Estos retos resaltan la tarea que tienen los comunicadores de adaptarse a las necesidades y lenguaje de las audiencias del mundo digital: ¿Cómo leen?, ¿Dónde leen? ¿Cuándo leen?, etc. A la misma vez, los medios de comunicación les urge encontrar la forma de de rentabilizar todos estos esfuerzos.
Una propuesta que busca dar solución a este tema tan complejo la ofrece el American Press Institute en el “Newsmedia Economic Action Plan” (PDF). En esencia, se trata de un plan que garantizaría la rentabilidad de la presencia de los medios en la Web por medio de la utilizacion de aparatos como el Kindle y la aplicación de suscripciones y/o micro-pagos, particularmente refiriéndose a los medios impresos. De llegar a establecerse, pienso que ofrecería una solución que se adapta a manera en que las personas reciben la información hoy en día. Definitivamente implica un esfuerzo que verá resultados tangibles a largo plazo, pues será un reto lidiar con la reticencia que normalmente presentan las personas al encontrarse con cambios tan radicales. Sin embargo, una vez este establecido el mundo de la información cambiará por completo. Seguiremos teniendo acceso a la marea de información que se multiplica a cada minuto, sin embargo, habrá una idea más clara entre lo que es “información” y lo que es “conocimiento”. Dará la oportunidad a las personas de accesar a la información que es relevante para ellos, y a los periodistas les brinda la oportunidad de especializarse aún más, establecer una relación más fuerte con sus audiencias, y aumentar su credibilidad.
